"La cola del gragón" David Coronado*

"El ejercicio del dominio descansa en la marcha autónoma de cada individuo" (David Coronado)

El consumo ha hecho que las personas busquen las maneras de socialización, la incorporación a una sociedad con tendencias "destructivas", debido a esa perdida de identidad que se refleja en su esencia propia.
Sin embargo "los rasgos constructivos del espíritu humano", - se entremezclan con estas nuevas tendencias haciéndole participe de la promoción cultural. Esta que a su vez no se define ante tanta gente, creyendo que adoptando todo, es parte de una construcción cultural, dejando en el olvido esas características que definen a su propia sociedad.

Es obvio que cuando se adquieren hábitus (Bourdieu) diferentes, el mundo social empieza una transformación a lo desconocido, a lo que, las adopciones resultan contradictorias en los modos de vida e incluso cambiando esos estilos. Como lo menciona Thomson en su análisis cultural, "es el estudio de la constitución significativa y de la contextualización social de las formas simbólicas".
La cultura se caracteriza por otorgar una distinción al mundo de las sociedades, acerca de todos sus procesos de comunicación e interacción con los demás, lo cuál pertenece, a las adopciones sociales dentro del surgimiento de tendencias, al consumo masificado, estas mismas que nos llevan a adentrarnos a lo que Coronado denomina "la cola del dragón".

Tenemos contrariedades para poder constituirnos, como personas selectivas y audaces al momento de adentrarnos a fondo a los intereses culturales, la incongruencia misma que resulta de las manifestaciones globales de cultura. Así pues, haciendo perteneciente lo ajeno y apropiándonos de sus rasgos. "Los consumos culturales se convierten en consumos personales y personalizados".